Para controlar que solo las personas autorizadas acceden a una determinada zona, lo mejor es montar un sistema de control de accesos, y este se encargará de permitir o denegar el acceso según los grados de acceso que usted haya preestablecido.
El sistema también guarda el registro de quien accede y donde accede para que disponga de toda la información.
El sistema de control de accesos hoy en día se suele montar mediante huellas dactilares, aunque también se puede montar mediante un teclado numérico y códigos para cada una de las personas.